domingo, 19 de agosto de 2007

s u n d a y b e a t s


-En qué mano está?- le pregunté
-En esa- me dijo señalándome la derecha.
Por supuesto: lo cambié a la izquierda.
-No, en ésta.
Ya no puedo tolerar el frío. Ya no más.
"Querida madre:
Estoy malo. Quiero ir a casa. Haz el favor de venir y llevarme a casa. Estoy en la enfermería. Tu hijo que te quiere.
Stephen"
Ya no logro caminar con tacones. Ya no más.
Pero no estoy tan vieja como dicen che, es solo que me calmé. Y que bien se siente el amor, que tibio y constante!

10 comentarios:

diego dijo...

sos una cambiadora de mano tramposa siempre? o fue sólo una ocasión especial?

me preocupa tu falta de honestidad.

shumi dijo...

siempre cambio la mano
menos a loncho
a él le pongo sorpresa en las dos.
primero le doy la que no dijo, después la que dijo.

diego dijo...

indignado estoy.
y empalagado.
:P

Anónimo dijo...

MUCHO MUCHO MUCHO lo quiero a Jorgito Harrison.
Y Mucho tambien quiero a Shumita.
Placer Pasar

teseoh dijo...

Creo que es el que más me gustó de lo que te leí. Pero de lo que te leí acá, en tu plop.
Sí, es el que más me gustó.

Uno, dos besos.

benjamin diamante dijo...

es cierto, hay una calma que se siente linda y que no es vejez. es como la calma de cuando eras chico y te despertabas un domingo a la mañana; es así, de tranquilo y de jugar.

shumi dijo...

sobre todo eso, lo de los domingos a la mañana... en mi infancia me acuerdo de estar en lo de mi abuela, o en lo de mis primos en 9 de julio, despertar el domingo e irme sola al living, prender la tele y ver nubeluz... en los cortes revisar la cocina e improvisar el desayuno. hasta que un mayor realmente se ocupe de uno.
saludos a tesheo y a tobilin, que bueno que pasen.

Anónimo dijo...

cachuli del alma, moño caido y delantal a cuadritos de Children´s Corner: Aunque no pueda estirar mi panza para que entres en ella y descanses, hoy te miro a los ojos para que me reflejes tus maravillas.

shumi dijo...

ESA ES MI MAMA! cristuli es mi madre, mi mamucha!
je, me hizo bien ese saludo, lo necesitaba.

Anónimo dijo...

Ay, ese pibe Dedalus